Ninguna tecnología es para siempre. Los discos duros se “cansan”, el software sale del mercado y las empresas en crecimiento se ven obligadas a adaptarse a las necesidades de los nuevos empleados. La ventaja es que la tecnología siempre está mejorando. La modernización al equipo adecuado en el momento preciso, es fundamental para mantener a su empresa avanzando en un mundo de negocios competitivos.
Cuándo hacer su upgrade
“¿Cuándo?” Esa es la gran pregunta. Sobre todo, porque las computadoras y otros equipos tecnológicos no vienen con fechas de caducidad, como los medicamentos o los alimentos. A veces hay signos bastante claros, como cuando el equipo toma demasiado tiempo para hacer su tarea o no soporta adecuadamente algún nuevo software.
Algunas empresas simplifican el proceso, manteniendo un calendario regular de actualización. Cada tres años es un plazo razonable para la evaluación de una nueva ronda de actualizaciones. Si usted tiene marcas, sistemas operativos y versiones de software, reemplazarlos por versiones más recientes puede ayudarle a optimizar su tecnología y mantener sus gastos de operación en un nivel adecuado.
También puede ser hora de cambiar si se ha producido una variación en su negocio.
Si su actividad se basa en redes inalámbricas y usted todavía está utilizando los equipos más antiguos 802.11b en su oficina, es un buen momento para migrar a un sistema 802.11g ó 802.11n. Un mayor ancho de banda puede acelerar su experiencia en redes de negocios.
Más empleados en su oficina pueden significar más demandas en la impresora. Al contar con una impresora láser con mayor capacidad puede ayudar a soportar esa carga de trabajo.
Vaya poco a poco
No es necesario que sustituya todo. Si sus equipos están todavía en buenas condiciones, puede aumentar el rendimiento mediante una memoria adicional, un nuevo y rápido DVD de escritura, un disco duro externo para más espacio de almacenamiento o las últimas versiones del software que más utilizan en su empresa. Pero igual de importante es darse cuenta cuando es momento de decir adiós y pasar a un nuevo equipo.
Y, finalmente, recuerde:
Haga un respaldo de todos sus datos antes de cambiar a un equipo nuevo. Si el movimiento de datos y el cambio de las computadoras no es su fuerte, busque un proveedor de TI que le ayude a instalar el nuevo equipo (hardware y/o software) y que haga la transición rápidamente.
Piense en el futuro. Seguramente usted desea que su equipo nuevo continúe siendo fuerte, al menos los próximos dos años.